TERAPIA FAMILIAR COMPARTIMOS. LA IMPORTANCIA DE LA FAMILIA EN LA DISCAPACIDAD.
Programamos dos sesiones de la TERAPIA FAMILIAR «COMPARTIMOS» los próximo días 25 de noviembre y 9 de diciembre de 2024. Esta terapia grupal está destinada a los miembros de las unidades familiares con hijos/as a cargo con TEA o con otras discapacidades como un espacio de apoyo mutuo donde, con el acompañamiento de un profesional de la psicología, trabajar aspectos de gestión emocional, el bienestar personal y familiar, la crianza, la atención a las necesidades educativas especiales, la promoción de la autonomía personal, etc.
LA IMPORTANCIA DE LA FAMILIA EN LA DISCAPACIDAD
El impacto que sufre una familia en el momento de afrontar la discapacidad de un hijo/a a cargo es muy relevante. La unidad familiar pasa por una serie de etapas que se podrían resumir de la siguiente manera (extrapoladas de las 5 fases del duelo de la psiquiatra Elisabeth Kübler-Ross):
- Negación: no aceptando el diagnóstico o conservando la esperanza de un error en el mismo.
- Enfado/culpabilidad: hay una situación de enfado ante la nueva circunstancia, culpándose a uno mismo de la situación o a otros miembros de la unidad familiar.
- Negociación: no llegan a asumir del todo la discapacidad del niño/a, pero se van mostrando abiertos al diálogo, buscando información por su cuenta o a través de profesionales para entender la nueva situación y buscar las herramientas para afrontarla.
- Depresión: se empieza a admitir la situación de discapacidad a partir del diagnóstico. Esto genera sentimiento de tristeza y desesperanza acompañados con otros síntomas típicos de los estados depresivos, como el aislamiento social o la falta de motivación.
- Aceptación: esta puede ser total o parcial, pero puede ir variando a lo largo del tiempo. En esta fase final, es importante ir consolidando la nueva situación, buscar ayuda y poner en marcha las estrategias y herramientas necesarias para que la unidad familiar se adapte a la condición de discapacidad de uno de sus miembros.
Durante las diferentes etapas, tener apoyo profesional y/o de otras familias que estén pasando o ya hayan pasado por esa situación es importante, como se hace en la TERAPIA FAMILIAR «COMPARTIMOS».
Recalcar que se debe partir siempre de un buen diagnóstico médico y de un buen asesoramiento en la búsqueda de las ayudas institucionales para aminorar el impacto de la discapacidad en el funcionamiento cotidiano de la familia. Ésta debe aprender las pautas para que la persona con discapacidad pueda afrontar su situación desde sus propias potencialidades individuales y sociales y cubriendo las dificultades con las ayudas institucionales a su alcance. En este proceso, la familia tiene un papel fundamental, sobre todo en el fomento de la autoestima y la inclusión del/a menor a cargo. Pero esto también conlleva que los diferentes miembros del núcleo familiar tengan los apoyos necesarios para que puedan cumplir este importante papel, accediendo a las ayudas, asesoramiento y acompañamiento emocional/social que van a necesitar.