Hasta el año 2013, fecha en que se publicó el DSM V (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales), el autismo y el síndrome de Asperger eran 2 categorías clínicas diferentes formando parte de los TGD (Trastornos Generalizados del Desarrollo). A partir del 2013, cuando se revisaron los sistemas de clasificación diagnóstica, estas dos categorías, autismo y asperger, se unificaron en la de Trastorno del Espectro del Autismo. Actualmente, se habla de TEA con diferentes especificadores relacionados con los niveles de apoyo, si existe discapacidad intelectual asociada y las dificultades significativas del lenguaje.
En el caso del síndrome de Asperger, como categoría diagnóstica, estaríamos hablando de un Trastorno del Espectro del Autismo sin discapacidad intelectual asociada y sin dificultades significativas del lenguaje.
Socialmente se mantiene la categoría de síndrome de Asperger como una función identitaria del colectivo, por el sentimiento de pertenencia que pueden presentar las personas que recibieron dicho diagnóstico, en su momento. Por este motivo, se sigue celebrando, desde el 2007, el 18 de febrero como día internacional del síndrome de Asperger, fecha que coincide con el aniversario del nacimiento de Hans Asperger, psiquiatra vienés al que se debe el nombre del síndrome.
Ayer la Asociación Autismo AOPA estuvo en Radio Ronda para explicar qué es el Asperger, qué dificultades y potencialidades tiene, las cuestiones escolares y laborales, el papel de las asociaciones en su atención, la importancia de la sensibilización social y las demandas del colectivo:
Entrevista sobre el Asperger en Radio Ronda